Historia y receta de las enfrijoladas
Las enfrijoladas son un plato tradicional de la cocina mexicana que consiste en tortillas de maíz bañadas en salsa de frijoles y rellenas de queso o pollo. Se suelen servir con crema, queso rallado, cebolla picada y cilantro. Son un antojito muy popular y económico que se puede encontrar en cualquier taquería o fonda del país.
Origen de las enfrijoladas
El origen de las enfrijoladas se remonta a la época prehispánica, cuando los indígenas mexicanos consumían el maíz y los frijoles como base de su alimentación. El maíz se cocía y se molía para hacer la masa, con la que se elaboraban las tortillas. Los frijoles se cocían y se machacaban para hacer la salsa, con la que se bañaban las tortillas. Estos dos ingredientes se complementaban perfectamente, ya que el maíz aportaba los carbohidratos y los frijoles las proteínas.
Sin embargo, la versión actual de las enfrijoladas, con queso y pollo, se debe a la influencia española, que introdujo estos productos en el siglo XVI. Según una leyenda popular, las enfrijoladas se inventaron en el pueblo de Tlaxcala, donde un campesino llamado Juan Pérez tenía una granja de gallinas y una pequeña parcela de maíz y frijoles. Un día, recibió la visita de un fraile franciscano, que venía a evangelizar la zona. Juan Pérez quiso agasajar al fraile con un buen plato, pero no tenía mucho que ofrecer.
Entonces, se le ocurrió cocer unas tortillas de maíz, rellenarlas con queso y pollo, bañarlas con salsa de frijoles y adornarlas con crema y cebolla. Al fraile le gustó tanto el plato que le pidió la receta y la difundió por todo el país. Así nacieron las enfrijoladas, que pronto se convirtieron en un símbolo de la cocina mexicana.
Otra versión de la historia dice que las enfrijoladas se originaron en el estado de Oaxaca, donde se cultivan más de 150 variedades de frijoles. Los oaxaqueños son famosos por su creatividad y diversidad gastronómica, y se dice que fueron ellos los que inventaron las enfrijoladas, usando diferentes tipos de frijoles, quesos y salsas.
Las enfrijoladas oaxaqueñas son consideradas las más ricas y las más auténticas, y se pueden degustar en los mercados y en las fiestas populares de la región.
Sea cual sea el verdadero origen de las enfrijoladas, lo cierto es que este plato se ha extendido por todo México y se ha adaptado a los gustos y a los ingredientes de cada lugar. Así, podemos encontrar enfrijoladas verdes, rojas, negras, con queso, con pollo, con carne, con huevo, con chorizo, con nopales, etc. Cada quien tiene su forma de hacerlas y de comerlas, pero todas tienen algo en común: son deliciosas y nutritivas.
Receta de enfrijoladas de queso y pollo
Ingredientes para las enfrijoladas
Para hacer unas deliciosas enfrijoladas de queso y pollo, necesitas los siguientes ingredientes:
- 12 tortillas de maíz
- 2 tazas de queso fresco desmenuzado
- 2 tazas de pollo cocido y deshebrado
- 4 tazas de frijoles negros cocidos
- 2 chiles chipotles adobados
- 2 dientes de ajo
- 1/4 de cebolla
- 2 cucharadas de aceite vegetal
- Sal al gusto
- 1/2 taza de crema
- 1/4 de taza de queso rallado
- 1/4 de taza de cebolla picada
- Cilantro fresco picado
Para preparar las enfrijoladas de queso y pollo, sigue estos pasos:
- Calienta el aceite en una sartén a fuego medio y fríe las tortillas por ambos lados hasta que estén ligeramente doradas y crujientes. Reserva sobre papel absorbente.
- En una licuadora, mezcla los frijoles, los chiles, el ajo, la cebolla y un poco de agua. Licúa hasta obtener una salsa de frijoles homogénea y sazona con sal al gusto.
- Calienta la salsa en una olla a fuego medio y deja que hierva unos minutos, removiendo de vez en cuando.
- Rellena cada tortilla con queso y pollo y dóblala por la mitad o enróllala. Coloca las tortillas rellenas en un refractario o en platos individuales.
- Baña las tortillas con la salsa de frijoles y espolvorea el queso rallado por encima.
- Hornea el refractario en el horno precalentado a 180°C durante 10 minutos o hasta que el queso se derrita. Si usas platos individuales, puedes calentarlos en el microondas por unos segundos.
- Sirve las enfrijoladas con crema, cebolla picada y cilantro. Acompaña con una ensalada verde o con arroz blanco.
Consejos para las enfrijoladas
Aquí te damos algunos consejos o trucos para mejorar tu receta de enfrijoladas de queso y pollo:
- Puedes usar el tipo de frijoles que más te guste, como pintos, bayos o peruanos. También puedes usar frijoles refritos en lugar de cocidos, para una salsa más espesa y cremosa.
- Puedes usar el tipo de queso que más te guste, como panela, Oaxaca, manchego o cheddar. También puedes usar queso vegano o tofu, si quieres una versión vegetariana o vegana.
- Puedes usar el tipo de pollo que más te guste, como pechuga, muslo o pierna. También puedes usar carne de res, cerdo o pavo, o sustituir la carne por verduras, como calabacín, champiñones o espinacas.
- Puedes usar el tipo de chile que más te guste, como jalapeño, serrano, guajillo o ancho. También puedes omitir el chile, si no te gusta el picante, o agregar más, si te gusta muy picante.
- Puedes usar crema agria, crema mexicana o yogur natural, para darle un toque ácido y refrescante a las enfrijoladas. También puedes usar salsa verde, salsa roja o salsa de mole, para variar el sabor y el color de las enfrijoladas.
Enfrijoladas fáciles
Te hemos enseñado la historia y la receta de las enfrijoladas de queso y pollo, un plato tradicional de la cocina mexicana que tiene su origen en la época prehispánica. Te hemos dado la lista de los ingredientes, el paso a paso de la preparación y algunos consejos para mejorar la receta. También te hemos contado la historia y la cultura popular mexicana que rodean a este plato, que es un símbolo de la identidad y la diversidad gastronómica del país. Esperamos que te haya gustado y que la pruebes en casa.
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