Santo Domingo de Guzmán fue un presbítero castellano y santo católico, fundador de la Orden de Predicadores, más conocidos como los dominicos, quien nació en Caleruega, Burgos, el 8 de agosto de 1170, cuya fiesta es celebrada por la iglesia católica el mismo día de su nacimiento.
Santo Domingo de Guzmán fue un presbítero castellano y santo católico, fundador de la Orden de Predicadores, más conocidos como los dominicos, quien nació en Caleruega, Burgos, el 8 de agosto de 1170, cuya fiesta es celebrada por la iglesia católica el mismo día de su nacimiento.

Santoral católico ¿Qué santo se celebra hoy 8 de Agosto?

Santoral católico ¿Qué santo se celebra hoy día 8 de Agosto? El 8 de agosto es una fecha muy especial para el santoral católico, ya que se conmemora la vida y obra de uno de los santos más importantes y venerados de la historia: Santo Domingo de Guzmán, fundador de la Orden de Predicadores, más conocidos como dominicos. Además, en este día también se recuerda a otros santos y beatos que dieron testimonio de su fe y amor a Dios con su ejemplo y martirio. En este artículo te contaremos quiénes son estos santos, qué hicieron y por qué son dignos de nuestra devoción.

Santo Domingo de Guzmán: el predicador de la verdad

Santo Domingo de Guzmán nació en Caleruega (Burgos) en el año 1170, en el seno de una familia noble y piadosa. Desde pequeño mostró una gran inteligencia y una profunda vocación religiosa. Estudió artes y teología en Palencia, donde se ordenó sacerdote y se hizo canónigo regular en la catedral de Osma. Allí se dedicó al estudio, la oración y la atención a los pobres.

En el año 1203, acompañó al obispo Diego de Acebo en una misión diplomática ante el rey de Dinamarca. En el viaje, se encontró con la realidad de la herejía albigense, que negaba la bondad de la creación y el valor de los sacramentos. Domingo sintió una gran compasión por las almas engañadas por esta falsa doctrina y decidió dedicarse a la predicación del Evangelio entre los cátaros, como se llamaban los seguidores del albigensismo.

Para ello, fundó una comunidad de frailes que vivían en pobreza, oración y estudio, y que recorrían las ciudades y los campos anunciando la verdad con humildad y caridad. Así nació la Orden de Predicadores, que fue aprobada por el papa Honorio III en 1216. Domingo organizó su orden en provincias y conventos, enviando a sus frailes a los principales centros culturales y universitarios de Europa. También fundó una rama femenina, las monjas dominicas, que se dedicaban a la vida contemplativa y al apoyo espiritual a los predicadores.

Domingo fue un hombre de gran santidad, celo apostólico y sabiduría. Se dice que recibió muchos dones sobrenaturales, como el de profecía, milagros y bilocación. También se le atribuye la difusión del rezo del rosario como arma espiritual contra el mal. Murió en Bolonia el 6 de agosto de 1221, rodeado de sus hijos espirituales. Fue canonizado por el papa Gregorio IX en 1234. Su fiesta se celebra el 8 de agosto porque ese día fue trasladado su cuerpo a un sepulcro más digno.

Santo Domingo es el patrono de los astrónomos, los predicadores, las embarazadas y las parturientas. Su símbolo es un perro con una antorcha en la boca, que representa su celo por iluminar al mundo con la verdad. Su lema es “Laudare, benedicere, praedicare”, que significa “Alabar, bendecir, predicar”.

San Cayetano: el reformador del clero

San Cayetano nació en Vicenza (Italia) en el año 1480, en una familia noble y cristiana. Estudió derecho en Padua y se trasladó a Roma, donde trabajó como secretario del papa Julio II y luego del papa León X. Sin embargo, no se dejó seducir por las riquezas y los honores del mundo eclesiástico, sino que llevó una vida de austeridad, oración y caridad.

En el año 1517, renunció a su cargo y se ordenó sacerdote. Junto con otros tres compañeros, fundó la Congregación de los Teatinos, que tenía como objetivo la reforma del clero y la renovación de la vida espiritual de los fieles. Los teatinos vivían en pobreza, sin propiedades ni rentas, dependiendo de la Providencia. Se dedicaban a la predicación, la administración de los sacramentos, la asistencia a los enfermos y a los pobres.

San Cayetano fue un gran devoto de la Eucaristía y de la Virgen María. Se dice que recibió el don de hacer milagros y que tuvo visiones místicas. Fue un reformador que anticipó el espíritu del Concilio de Trento, que se celebró poco después de su muerte. Murió en Nápoles el 7 de agosto de 1547. Fue canonizado por el papa Clemente X en 1671. Su fiesta se celebra el 8 de agosto porque ese día fue enterrado.

San Cayetano es el patrono de los desempleados, los trabajadores, los banqueros y los jugadores. Su símbolo es un pan, que representa su confianza en la Providencia y su generosidad con los necesitados. Su lema es “Nihil mea, sed tua voluntas fiat”, que significa “No se haga mi voluntad, sino la tuya”.

Otros santos y beatos del 8 de agosto

Además de Santo Domingo de Guzmán y San Cayetano, el santoral católico recuerda hoy a otros santos y beatos que nos inspiran con su testimonio de fe y amor. Estos son algunos de ellos:

San Altmano de Passau: fue obispo de Passau (Alemania) en el siglo XII. Se distinguió por su defensa de los derechos de la Iglesia frente al poder imperial y por su apoyo a las reformas del papa Gregorio VII. Fue desterrado por el emperador Enrique IV y murió en el exilio en 1091.

 

San Emiliano de Cízico: fue un mártir cristiano del siglo IV. Era un soldado romano que se negó a ofrecer sacrificios a los dioses paganos durante la persecución del emperador Diocleciano. Fue torturado y decapitado en Cízico (Turquía) en el año 303.

 

San Eusebio de Milán: fue obispo de Milán (Italia) en el siglo V. Sucedió a San Ambrosio en la sede episcopal y continuó su labor pastoral y doctrinal. Defendió la fe católica frente a las herejías arriana y pelagiana. Murió en el año 462.

 

San Famiano de Galese: fue un ermitaño italiano del siglo XI. Vivió una vida de penitencia y oración en una cueva cerca del río Tíber. Realizó milagros y conversiones por su santidad y carisma. Murió en el año 1036.

 

San Marino de Anazarbe: fue un médico cristiano del siglo III. Ejercía su profesión con amor y generosidad, especialmente entre los pobres y los enfermos. Fue arrestado por su fe durante la persecución del emperador Decio y murió quemado vivo en Anazarbe (Turquía) en el año 260.

 

San Mummolo de Burdeos: fue abad del monasterio de Fleury (Francia) en el siglo VII. Se destacó por su sabiduría, su piedad y su celo por la observancia monástica. Fue enviado por el rey Dagoberto II a restaurar la disciplina en el monasterio de San Severino en Burdeos, donde murió en el año 678.

 

San Pablo Ke Tingzhu: fue un mártir chino del siglo XIX. Era un catequista que ayudaba a los misioneros extranjeros a difundir el Evangelio entre sus compatriotas. Fue arrestado por las autoridades durante la rebelión de los bóxers, que perseguían a los cristianos. Fue torturado y estrangulado en Shuangshuixi (China) en el año 1900. Fue canonizado por el papa Juan Pablo II en 2000. Su fiesta se celebra el 9 de julio, junto con otros 119 mártires de China.

Santa María MacKillop: fue una religiosa australiana del siglo XIX. Fundó la Congregación de las Hermanas de San José del Sagrado Corazón, que se dedicaba a la educación y asistencia a los pobres y marginados, especialmente en las zonas rurales de Australia y Nueva Zelanda. Fue una mujer de gran fe, fortaleza y caridad, que sufrió muchas dificultades y oposiciones por parte de algunos obispos y clérigos. Murió en Sídney el 8 de agosto de 1909. Fue canonizada por el papa Benedicto XVI en 2010. Es la primera santa de Australia.

 

Beato Agustín Ota: fue un samurái cristiano del siglo XVII. Era un samurái convertido al cristianismo, que sirvió como intérprete y catequista al misionero jesuita San Francisco Javier. Fue arrestado por las autoridades durante la persecución del shogun Tokugawa Ieyasu, que prohibió el cristianismo en Japón. Fue quemado vivo en Nagasaki el 8 de agosto de 1622. Fue beatificado por el papa Pío IX en 1867.

 

Beata Isabel Renzi: fue una religiosa italiana del siglo XIX. Fundó la Congregación de las Hermanas Maestras del Sagrado Corazón, que se dedicaba a la educación cristiana de la juventud, especialmente de las niñas pobres y abandonadas. Fue una mujer de gran amor a Dios y a los demás, que vivió una intensa vida espiritual y mística. Murió en Coriano (Italia) el 14 de agosto de 1859. Fue beatificada por el papa Juan Pablo II en 1989.

Lista de santos del 8 de agosto

Para terminar este artículo, te ofrecemos una lista completa de todos los santos y beatos que se celebran hoy, según el calendario litúrgico católico:

  • Santo Domingo de Guzmán
  • San Cayetano
  • San Altmano de Passau
  • San Emiliano de Cízico
  • San Eusebio de Milán
  • San Famiano de Galese
  • San Marino de Anazarbe
  • San Mummolo de Burdeos
  • San Pablo Ke Tingzhu
  • Santa María MacKillop
  • Beato Agustín Ota
  • Beata Isabel Renzi
  • Beato Juan Felton
  • Beato Juan María Zong Ruoji
  • Beato Luis Bertran
  • Beato Pedro Fabro